Cosas del destino 11

Vida 3

De cómo las promesas hacen magia

Changmin abre los ojos cuando el frio comienza a entumecer su cuerpo, afuera el sol aun no sale y el cielo es de un azul palido, se estira con pereza incapaz de hablar cuando sus manos chocan contra la espalda suave de Junsu, afuera en las calles la gente comienza a caminar, puede escuchar por la ventana las platicas de la gente que curiosa debate sobre si alguno de los dos jóvenes son culpables o no, Min siente un arranque de rabia

Observa al cuerpo medio frio del mayor que parece mas delgado y demacrado, no necesita nada mas para tomar valor, necesitan escapar, miles de imágenes del ayer se amontonan frente a sus ojos como una extraña película, su niñez, la muerte de sus padres, Yoochun, el orfanato y Junsu, entonces Max tiene la certeza de estar vivo, de ser egoísta y  necesitar un dia de paz

Sus ojos se fijan en la figura del mayor que se hunde entre las viejas y feas sabanas de la prisión, respira profundo hasta que siente los pulmones llenos de aire, se acerca con sigilo mientras le mueve el hombro con determinación, porque el cuidara de Junsu pues lo ha entendido solo él puede otorgarle la paz y solo con su compañía se siente en completa calma, no quiere dejarlo ir, no piensa permanecer ausente de todo como con sus padres esta vez lo intentara de corazón

Los ojos de Junsu se abren confusos y tardan un momento en enfocarlo, después viene esa sonrisa deslumbrante que parece apagar todas las sombras que intentar cernirse sobre ellos, lo observa desde un rincón ponerse la ropa sucia en silencio, toma fuerzas y se acerca hasta tomar sus manos, juega con ellas

-Me gustan tus trucos, eres bueno con las manos- el mayor se sonroja cuando entiende el sentido de la frase y separa los labios- Shh ya casi es hora, el guardia vendrá

El silencio que prosigue vuelve al menor mas consciente del terror que parece estar dentro de su Hyung, pues se mantiene callado por un largo periodo de tiempo mirando las facciones del rostro de Max que comienza a sentirse un poco intimidado, después se pone en puntillas y deposita un beso

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Las horas pasan, Changmin mueve las piernas en un tick nervioso, le duele el pecho a causa de la ansiedad, toma la mano de Xiah con firmeza y la cabeza le da vueltas se siente un poco agonico, sigue sin entender porque todo esto tiene que suceder en su vida, de pronto se siente terriblemente solo y culpable por colocar a su Hyung es esta horrible situación

El sol esta en lo mas alto, cuando al fin el guardia aparece por la rejas, viene con una sonrisa triunfante y una de esas armas nuevas que disparan balas a velocidad impresionante, lleva una charola entre las manos, un vaso de agua sucia oscila en ella al lado de un plato gris, los jóvenes le observan sacar las llaves y abrir la reja. El mas alto se pone en pie una vez que el hombre ha dado un paso al frente, se siente un tanto monstruoso cuando le propina un fuerte golpe en la nuca, después sin darle oportunidad de nada mas tapa su boca y esta por usar la cadena para asfixiar al hombre  cuando Xiah se interpone

-Para, esta desmayado- sus miradas se cruzan y es como si toda la adrenalina que circula por las venas de Changmin ardiera- No eres un asesino

-Corre!- replica el moreno poniéndose de pie tan rápido como puede tomando la mano del mago que le sigue dando traspiés, empujan la reja con una patada y cruzan a toda velocidad por el largo pasillo

Continúan la carrera con las costillas adoloridas, bufando e intentando retener mas el aire para continuar con la carrera, abren las puertas sin sutileza demasiado asustados, desesperados por salir de ese maldito lugar, es como si corrieran en un maldito laberinto con los ojos vendados, Max esta sudando y Junsu jadea a sus espaldas, al fin encuentran una gruesa puerta delante de un gran ventanal corren a ella

Jalan los picaportes de oro con determinación, logran abrir una estrecha grieta por la que Max hace que Junsu cruce primero para seguirlo con el pecho adolorido, una vez fuera se encuentran con un espectáculo de gente atónita observándoles, los guardias vienen desde la entrada principal del castillo, detrás la vieja directora del orfanato grita que Max es un asesino y pide que le detengan, la masa se vuelca sobre ellos

Se sienten atrapados, retroceden lividos hasta la puerta que hace poco cruzaran, en la calle montones de anuncios escritos con fina letra explican su detención y futura muerte, los dibujan como asesinos y ladrones, las mujeres gritan, los hombres dan pasos dubitativos al frente alguien susurra “Son solo chicos” y un cuchicheo general se apodera de la multitud, Xiah esta temblando prensado del brazo de Max que intenta encontrar una salida a todo esto

-Aquí!- una voz estridente les llama desde el centro de la plaza, un joven palido saca de entre la capa azul un par de conejos blancos que el menor reconoce de inmediato

Las pequeñas bombas caseras explotan, hay mas gritos y luego el caos gente corriendo de un lado  a otro nerviosa, carretas volcándose y chocando por los caballos asustados los guardias rompen filas y corren entre la multitud queriendo llegar a los jóvenes que aun permanecen inmóviles en la puerta. Dos hombres con un hermoso antifaz aparecen ante ellos y le empujan por los hombros sonriendo

-Yunho…

-Tienen que correr, Jae no tiene tantas bombas- una nueva ronda de humo y explosiones se escucha a lo lejos, Changmin esta confundido

-Vamos- entrelaza sus dedos con los del mayor que asiente mientras Yoochun lanza patadas un par de guardias, mientras corren le escuchan disculparse diciendo algo acerca de la neblina, caos y miedo, es lo único que perciben ambos chicos que corren de un lado a otro esquivando gente histérica y huyendo de algunos aldeanos que intentan sin éxito atraparlos

Van dando tumbos por el lugar, se alejan de la multitud con una pequeña turba detrás de ellos, poco a poco mas gente parece dispuesta a atraparlos o defenderlos se crea una confusión y cuando sus dedos se separan, el miedo se apodera por completo de ellos. Al comienzo van uno al lado del otro pero un minuto después están desviándose por caminos diferentes un liquido como veneno se le resbala por la garganta a Max cuando es incapaz de ver la figura esbelta de Junsu

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Los pasos de Xiah no se detienen, se pregunta dónde demonios podrían ocultarse de todo esto, se da cuenta que esta sin salida y teme estar dormido en una terrible pesadilla donde no importa cuanto lo intente todo tendrá un funesto final, toma una calle rumbo al acantilado, corre con toda sus fuerzas, entra en el primer lugar que encuentra, corre por la hermosa casa adoquinada hasta que cae en cuenta es una de las tantas caballerizas del rey, tiene un piso de mármol cincelado que reluce con el sol y hace eco a sus pisadas, cruza con la esperanza de encontrar algo con que defenderse para salir de ahí, tiene que encontrar a Changmin

Un ruido le llama la atención así que lo sigue sin ser muy consciente de ello, deja que sus paso le lleven por las bonitas escaleras adornadas con enredaderas, pequeñas flores brotan de entre las hojas, sus pasos se vuelven menos rápidos es como estar en medio de una sesión hipnótica, deja de sentirse dueño de sus movimientos y aunque su instinto le indica que vuelva sobre si e intente escapar continua con la subida. La cabeza le duele, está palpitándole como si fuera a partirse por la mitad se lleva las manos a los oídos, el sonido de las olas afuera le perturba tanto como la melodía que parece acompañarlo, camina sin remedio al único balcón

Esta por perder la cabeza y es incapaz de escuchar nada más que la melodía detrás es esas cortinas vaporosas, tiene los ojos llorosos su mente parece prisionera, abre mucho los ojos cuando encuentra el balcón vacío, entonces se da cuenta justo al lado en el balcón gemelo con una multitud a sus pies Changmin canta, lo hace con esa voz que parece hechizarlo, se siente como si su mente estuviera siendo acariciada y violada por las palabras arrastradas y suaves que emanan de los labios resecos de su amante

-Junsu, sal de aquí!- interrumpe el canto en cuanto le ve, el mayor tarda un rato en comprender

-Que haces ahí?

-Vete!- lo ve separar los labios de nueva cuenta y recuerda, su canto, es una maldición mira a sus pies la gente parece haber despertado de apoco, algunos gritan, otros caen en el sopor de la voz del joven mientras unos más entran a la caballeriza, se terminó están atrapados

-Te amo, por siempre- susurra Junsu mientras extiende una mano por el balcón rozando los dedos del más alto que esta como loco –Esta bien, ellos no tienen que morir, detente Changmin

-Hyung…- los puños están apretados, Junsu se inclina un poco más desde su balcón e intenta acariciar una mejilla del menor

Las puertas de Xiah se abren y la expresión de Changmin es de pánico autentico, se queda muy quieto por un segundo después observa su habitación con odio, se trepa en el resquicio del balcón Junsu ahoga un grito, le mira suplicante pero el más joven pare imperturbable, no le escucha aun cuando el mayor grita, Max se mantiene en esa posición suplica desde su lugar abajo la gente reprime los gritos

-Estoy aquí, solo yo tengo que pasar por esto!- grita a la multitud con los brazos abiertos, completamente expuesto. En el pecho la cadena brilla contra el sol proyectando una sombra rojiza sobre las calles

Abajo sus compañeros y amigos gritan, Junsu siente la cabeza cada vez más pesada a causa del dolor, están atrapados, los guardias han entrado a su habitación. Changmin da un paso adelante por el alfeizar conservando el equilibrio a duras penas, Xiah retrocede cuanto puede en el viejo balcón que cruje cuando un hombre demasiado pesado pone un pie delante

-Te matare aquí mismo- se escucha la voz de la antigua dueña del orfanato donde viviera Max

-Déjalo, porque me haces daño? En que falle!!- grita Min a un paso de brincar al balcón con su Hyung y el mayor siente que ha perdido la cabeza

La mujer está riendo a carcajadas mientras abajo sus amigos gimotean e intenta abrirse paso con los corpulentos guardias medio circo está ahí intentando ayudar en algo, los niños gritan para que nadie se acerque al mago otros esperan el desenlace con impaciencia, la anciana se abre paso con un par de guaridas escoltándola, su mano como garra se cierra sobre la muñeca de Junsu que intenta apartarse un fuerte crujido indica que el balcón está a un paso de ceder

-Agradece tu muerte a él-señala a Min que permanece muy quieto-  En que has fallado? No es suficiente ser hijo del hombre que siempre ame? Si tu madre no hubiera llegado al pueblo, ella pudo quedarse en su maldito hogar recogiendo manzanas! – un empujón al mayor que choca contra el adornado murillo que ser rompe en dos, los gritos de sus amigos abajo no se hacen esperar el balcón está cayendo centímetro a centímetro a un paso de desprenderse por completo de la casa, abajo las olas rompen con el rocoso acantilado –Tú no tienes derecho a amar

Changmin muerde su labio y Junsu le lanza una mirada suplicante, sabe lo que el mayor quiere, y se siente tentado a solo dejarlo ir sin embargo una sensación de opresión se apodera de su cuerpo, invade su mente de manera rápida, baja la mirada perdiéndose entre las olas una vez que su Hyung caiga no tiene ninguna posibilidad, la sola idea le parece repulsiva una vida sin él no sería suficiente castigo, recorre a la multitud abajo decepcionado hasta que sus ojos se cruzan con los de la vieja adivina del circo que le sonríe

-Esta vez no- habla con determinación-No permitiré que ella se salga con la suya, no te perderé Hyung – camina y brinca desde esa distancia hasta el balcón que esta por desprenderse, Junsu grita cuando bajo el peso del menor el balcón cae

Todo da vueltas, van demasiado prisa van a morir, Changmin atrae el cuerpo de su Hyung a sus brazos con ayuda de la gravedad. Intercambian miradas esperando que las piedras lleguen y los despedacen les es imposible mantenerse juntos sus cuerpos se separan, solo sus manos intentan mantenerse unidas. Los de gritos horror apenas se escuchan en sus oídos, es como si un zumbido se hubiera instalado en ellos

Los dedos de Junsu resbalan entre los de Changmin se observan y las lágrimas por fin aparecen en sus rostros, una ventisca les aleja el cuerpo del mayor gira, Max cierra los ojos no puede, no quiere verlo, pero la exclamación de sorpresa un par de metros arriba le hacen cambiar de opinión desvía la mirada y el mismo se encuentra con la boca abierta cayendo a toda velocidad pasa al lado de su Hyung que sostiene las manos al frente atónito, su piel antes cremosa ahora es traslucida, su cuerpo se deshace en pequeñas gotas de agua los niños arriba gritan impactados algunos aplauden. Es corto, cinco segundos como máximo el cuerpo de Kim Junsu desaparece, una brisa cae sobre el rostro de Max como un beso y poco después el océano se agita como si alguien realmente hubiese caído a él

Changmin choca con la primera piedra y siente sus brazos romperse, está por morir, no sabe si lo que  sucedió hace un segundo es verdad o una visión, se ha golpeado en la cabeza sin notarlo o la idea de ver morir a su Hyung le es tan aterradora que se ha inventado todo esto? No le queda mucho tiempo para averiguarlo se despide del mundo y mira al frente cuando una luz le rodea, siente calor, se desintegra, no le resulta doloroso, se confunde cuando los rostros de la gente y amigos no desaparecen por el contrario parecen cada vez más cercanos

Deja de entender que pasa y ve el rostro de la adivina entre la gente, sabe que está seguro así que cierra los ojos, cae en un extraño confort, Junsu no ha muerto lo siente, lo sabe en el corazón que palpita con fuerza inusitada, lo último que escucha es el grito de frustración de la vieja mujer del orfanato

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La gente observa con la boca abierta al precipicio, los jóvenes del circo tiene un semblante pálido, Yunho aplaude y el resto de la gente le acompaña, Yoochun tiene una mano sobre la espalda de Jaejoong, entonces cuando parece que el cuerpo de Changmin se ha disuelto en ese rayo de sol algo increíble ocurre y de entre las rocas al fondo del mar emerge volando con destreza y velocidad una pequeña ave con las plumas de alrededor de la cabeza amarillas como el oro, en el pecho un montón de plumas rojas

El pequeño animal revolotea un par de minutos entre la gente, vuela de un lado a otro hasta que logra alcanzar más altura, la vieja mujer que aún permanece en el borde del caído balcón se da la vuelta cuando el pueblo comienza a abuchearla y gritar cosas , el ave sube más y más hasta posarse en una de las ramas cerca del antiguo balcón separa las alas y el pequeño pico se abre dejando escuchar su hermoso trinar y las lágrimas se escapan entonces por los ojos de todos los ahí presentes

Hay leyendas, cuentos aun cuando el tiempo pasa y ya nadie parece recordarlo,  cada que un circo se detiene en el pueblo cuenta historias a los niños, historias sobre héroes que se convierten en habitantes del mar o que vuelan por los aires, historias de amor sobre un joven que se volvió espuma, historias de eternidad donde los amantes decidieron morir juntos y fueron recompensados

Historias pues de promesas mágicas e inolvidables 

Sig